Especie anual de la familia de las Cucurbitáceas. Existe mucha variabilidad entre las distintas variedades, aunque en su mayoría el cultivo es similar. Desarrolla una planta rastrera muy extensa, con hojas medianas y grandes. Especie monoica, con presencia de flores masculinas y femeninas. El fruto se desarrolla después de una óptima polinización y se cosecha maduro al final del cultivo.
Se cultiva en climas y estaciones cálidas, ya que requiere alta temperatura y horas de luz para su correcto desarrollo. Se puede sembrar de forma directa o en semillero.